Esta hermosa casa de piedra mallorquina se encuentra a las afueras del pueblo de Binissalem pero con una proximidad tal que se puede uno acercar paseando o en bicicleta. Además posee unas vistas espléndidas; a la Tramontana o al agradable pueblo de Binissalem. La vivienda de unos 230m2 y divida en dos plantas se distribuye en planta baja en un comedor salón con chimenea, una cocina abierta, un estudio, un baño, un dormitorio y la lavandería. Ya en la planta superior encontramos otros dos dormitorios, un baño, y una terraza solarium con vistas impresionantes en uno de los dormitorios. Esta fantástica vivienda se abre a un hermoso y cuidado jardín, donde además de una zona de árboles, tenemos una piscina de 60m2, un jacuzzi y una casita de invitados. La finca dispone de agua de pozo propio, está totalmente vallada y presenta dos entradas. Es el lugar ideal para disfrutar de la tranquilidad, la naturaleza y la proximidad a un casco urbano tradicional y conocido por sus ricos vinos. No deje de visitarla, pues le encantará.[IW]