Ubicada en un terreno elevado de 21.403 m², esta tradicional casa de campo mallorquina está rodeada de exuberante vegetación balear y ofrece un tranquilo retiro del ajetreo y el bullicio de la vida cotidiana con hermosas vistas al mar.
La casa principal es una armoniosa mezcla de encanto rústico y confort moderno. En la planta baja hay un amplio dormitorio con baño, un luminoso salón con chimenea, ideal para veladas acogedoras, una gran cocina con comedor, un lavadero y un aseo de invitados. En la primera planta hay 3 amplios y cómodos dormitorios, dos cuartos de baño y una terraza, ideal para empezar la mañana con un café y vistas al mar.
Existe un segundo edificio que también ofrece muy buenas vistas al mar. Es un espacio versátil perfecto para los huéspedes, ya que les ofrece intimidad y comodidad, o un entorno tranquilo para practicar yoga.
Varias terrazas y una piscina de 56 m² hacen de esta propiedad una oportunidad única de poseer un retiro perfecto en Mallorca.
Dispone de pozo propio y suministro eléctrico.