Con un jardín privado y una amplia terraza, estas residencias ofrecen un santuario de serenidad. En la planta baja encontrará un amplio salón-comedor con cocina abierta al jardín, un dormitorio doble y un aseo para invitados. En la primera planta, tres dormitorios dobles, uno de ellos con vestidor, y dos baños, uno de ellos en suite, ofrecen un espacio íntimo y lujoso para toda la familia.[IW]