Esta propiedad única, construida en 1890 y renovada con mucho gusto, conserva elementos tradicionales mallorquines como techos altos con vigas de madera y baldosas de terracota hechas a mano. Con una superficie construida de 426 m² y 368 m² útiles, este chalet independiente ofrece un espacio amplio y acogedor distribuido en varias plantas.
En la planta baja, encontrarás un apartamento independiente con acceso directo desde la calle. Este espacio cuenta con una habitación doble, baño completo, cocina abierta al salón y acceso a un encantador jardín con piscina, ideal para disfrutar del clima mediterráneo. Además, la planta baja alberga un enorme salón comedor, una cocina abierta y una terraza con porche, perfecta para reuniones familiares y cenas al aire libre.
La planta superior es un oasis de tranquilidad con una terraza que ofrece vistas impresionantes hacia las montañas. Aquí, la amplia habitación principal cuenta con baño en suite y acceso directo a la terraza. Dos habitaciones dobles adicionales con vestidores y un baño completo completan esta planta, proporcionando comodidad y privacidad para toda la familia.
Esta joya inmobiliaria también incluye armarios empotrados, trastero, calefacción eléctrica de gasoil y una plaza de garaje. Con una orientación norte, este y oeste, la casa se baña en luz natural durante todo el día. La parcela de 410 m² ofrece espacio adicional para disfrutar del aire libre.
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