Finca rustica antigua con encanto en Olleria. Posee una parcela de 5.000m2 completamente vallada, con 300m2 construidos, distribuidos de la siguiente manera. En la planta baja hay una terraza cubierta para poder disfrutar de la tranquilidad del entorno, un salón comedor con chimenea, una cocina, dos habitaciones y un baño. Además, hay un amplio patio que conecta a las diferentes partes de la casa, proporcionando un espacio acogedor al aire libre. Subiendo a la primera planta encontramos un pasillo que nos guía, a cinco habitaciones, una de ellas se abre a una terraza panorámica que ofrece vistas impresionantes a la naturaleza circundante. Esta finca también tiene, un almacén y una estancia que era ocupada para antiguos jornaleros con chimenea y un baño. Esta propiedad cuenta con comodidades como luz eléctrica y agua potable. En el exterior hay un jardin con pinos y viñas que aportan un toque de serenidad. En definitiva, esta casa de campo une lo antiguo con las comodidades contemporáneas en un entorno natural que invita la paz y la contemplación.