Edificio singular del Siglo XVIII, perteneció y fue habitada por Emilia Pardo Bazán a finales del Siglo XIX. Se compone de edificación principal, dividida en dos plantas y distribuida en varias estancias, edificaciones anejas destinadas a vivienda de caseros y dependencias auxiliares como leñera, bodega, etc. y terreno dedicado a patio y jardín. La finca en conjunto está delimitada por un gran muro de piedra, la edificación principal es de construcción antigua típica gallega, señorial, de tipo solariego, noble y con unas características constructivas y arquitectónicas singulares y muy valiosas. Dispone de escalera de piedra que da acceso a una galería adintelada. En el comedor de la planta superior se conserva el mobiliario original (mesa y aparadores holandeses) utilizado por Emilio Pardo Bazán. Tiene pozo propio y Cruceiro de piedra con cruz tallada. Cabe destacar el estado de conservación de esta propiedad, siendo una casa en uso y habitada actualmente. Además indicar que cabe la posibilidad de segregar parte del terreno, el cual se encuentra en Ordenanza 5, en el cual se podría construir hasta 3 chalets con parcelas mínimas de 500 m2 o bien una edificación de uso hotelero.