Finca rústica con siete apartamentos independientes. Una propiedad única en un enclave como ninguno, lindando con un río, idónea para retiros espirituales, un pequeño hotel con un encanto único o como inversión en alquileres. El inmueble está compuesto por siete apartamentos de 2 y 3 dormitorios (3 de 3 dormitorios y 5 de 2 dormitorios), todos ellos con entrada totalmente independiente. Tres de los apartamentos están actualmente alquilados, el resto necesitan reforma (en diferentes grados). Para mayor rentabilidad, se puede separar uno de los apartamentos en dos, dando un total de 8 apartamentos independientes. Hay suficiente espacio de aparcamiento para una veintena de coches en el interior de la propiedad, así como espacio más que suficiente para banquetes, fiestas al aire libre, pequeños congresos y reuniones... Está permitido el uso del río, que además a pocos metros tiene un pequeño barraje que permite un mayor nivel de agua justo delante del terreno. Por si esto fuese poco, una gran terraza de más de 400m en primera planta dota al conjunto de aún más posibilidades y carácter. Una vez puesta al día toda la propiedad, requerirá de muy poco mantenimiento, ya sea para uso hotelero, de restauración o alquiler de apartamentos (a largo plazo o turístico).