Cómo describir este espectacular bajo que, engarzado a la ciudad, vela con sigilo extraordinario un secreto. Dilatado, espacioso, ignoto, incita a la creatividad, a la innovación y, con generosidad, consiente hipotetizar sobre sus desemejantes posibilidades. Cuando cruzas su umbral y te adentras en la penumbra lóbrega del ambiente silencioso que lo impregna, percibes la luz penetrando, captando toda la atención y, es entonces que con suma delicadeza, se despliega un asombroso patio, casi un palco hacia la vida; la cuadratura de una platea que siente, que trasmite, que respira en el epicentro de la gran urbe que lo circunda. Sus muros pétreos, sólidos, graníticos, esperan inertes un diseño interior que les otorgue su belleza natural, indómita ante el paso de los años. Simplemente 606 metros cuadrados para transformar ensoñaciones en realidades.
Posibilidad de alquilar.