La parcela disponible presenta una superficie de algo más de 800 m2, que alberga una vivienda de 337 m2. Es aquí donde cualquier estancia se convierte en una experiencia de descanso única, con el inmejorable telón de fondo del mar Mediterráneo. El dormitorio del primer piso ofrece una bella panorámica del mar, lo mismo que el baño y la terraza que esta estancia posee con carácter privado. En cualquier caso, es en el jardín y la piscina de la amplia terraza donde la simbiosis con la naturaleza resulta más intensa. Al margen de los detalles anteriormente destacados, las bondades de la vivienda se hacen evidentes también en la planta baja. Es aquí donde se encuentra el amplio comedor-sala de estar, así como tres dormitorios y otros tantos baños, lo cual permite alojar con total comodidad a un considerable número de huéspedes. Además, es en esta planta donde se encuentra el acceso al notable jardín. Desde la óptica de la inversión inmobiliaria con fines comerciales, se trata de un inmueble espacioso y muy idóneo para garantizar una desconexión completa a los visitantes. Posibilidad de otra parcela contigua a la casa.