Una propiedad que por su exquisita sencillez y su discreta belleza busca semejantes. Rodeada de verdes jardines y hermoso arbolado se extiende esta hacienda residencial sobre una parcela llana y orientada hacia el sur. La vivienda con el dormitorio principal y el baño fabuloso la delicada arquitectura sarracena. Al mismo nivel encuentra la vivienda de los huéspedes y las zonas exteriores con la cocina de verano y diversas terrazas de seductor estilo mediterráneo. El irresistible encanto de esta finca no solo está en la mesura y caprichoso plano horizontal, sino sobre todo en el juego de contrastes y la armonía presente entre la tecnología moderna y el tradicional arte de construcción; lo antiguo y lo novedoso o mejor la sencillez hermanada con la exigencia. Una seductora mezcla y que nadie podría imaginar tan perfecto y situada prácticamente a la entrada del casco antiguo de Jávea