25 años dan para mucho. En 1999 nace el Restaurante La Juguetería, dando una vuelta de tuerca a la restauración tradicional existente hasta el momento en Liérganes. Una corriente nueva con una manera de presentar platos tradicionales rodeada de un ambiente de nostalgia, contemplando juguetes que evocan tiempos pasados. Esta combinación de decoración y buena restauración ha hecho que el tiempo haya respetado un negocio, que hoy podemos decir, es un clásico en la restauración dentro de un pueblo turístico como es Liérganes. Atrás quedaron crisis duras como las de los años 2012, o la reciente del COVID, pero este negocio ha sorteado las dificultades y sobrevive a día de hoy, con más vitalidad que nunca. La fuerza turística que ha experimentado el pueblo de Liérganes en los últimos años hace que, sin duda alguna, sea un negocio rentable. Hoy sus propietarios piensan en el descanso, con la certeza de dejar un negocio en "plena forma", se plantean la venta y buscan entregar el testigo a quien se sienta con fuerza empresarial y desee hacer realidad su sueño, en la restauración o planificando cualquier otra actividad hostelera. El edificio se presta a ello, incluso para prepararlo entero para 5 o 6 apartamentos turísticos. El edificio en planta baja, dedicado a Restaurante, está distribuido en comedor, barra y comedor, servicios y aseo, y las zonas de cocina y lavado junto a una pequeña zona de almacén. Con capacidad de 37 plazas en el comedor, 22 plazas en mesa en la zona de barra y además, cuenta con una terraza, con toldo y sombrillas con capacidad para 32 personas. La segunda planta del edificio fue una antigua pensión con 10 habitaciones y 2 baños completos. Hoy su uso es de almacén y algunas estancias para salón y habitaciones, con posibilidades para, con una pequeña reforma, habilitarlo como vivienda o plantear apartamentos turísticos. Liérganes declarado Conjunto Histórico desde 1999, es una buena elección para vivir. Calidad de vida por los servicios que ofrece el municipio: colegio, ambulatorio, comercio en general... forma parte de los pueblos bonitos de España, en el corazón de Cantabria, bien comunicado tanto por carretera (a 20 min de Santander) como por tren (a 40 min de Santander, salidas cada hora). Un casco antiguo donde se mezclan diferentes estilos arquitectónicos (renacentista, barroco, neoclásico) el paseo por sus calles nos traslada a tiempos pasados. La tranquilidad del ambiente y el entorno verde de sus praderas, siempre vigilados por las conocidas "tetas de Liérganes" (dos picos rocosos que se pueden observar desde cualquier punto de la villa) y la proximidad al parque de Cabárceno (a 10 min) hacen de este un enclave ideal para un negocio de hostelería no solo estacional sino de todo el año. En los últimos 3 años el incremento de visitantes de fin de semana es algo evidente, tomando ese cariz turístico de los pueblos que tienen rincones atractivos para el visitante. *El precio no incluye impuestos ni gastos de notaría ni registro