Te presentamos esta maravillosa villa, es un espacio fluido y accesible en su totalidad, con rutas que permiten transitar tanto en el interior como en el exterior, otorgando independencia de acceso a cada planta. Esta villa ofrece una variedad de perspectivas del complejo arquitectónico y su entorno, donde el mar y Sierra Cortina actúan como impresionantes telones de fondo que realzan la experiencia.
La entrada principal de la villa se encuentra estratégicamente ubicada en la parte baja de la parcela, acompañada de un generoso espacio de estacionamiento con capacidad para dos vehículos. Una elegante lámina de agua, flanqueada por cómodas tumbonas, sirve de bienvenida a la planta baja de la casa, caracterizada por sus robustos muros revestidos de mampostería. Desde el amplio salón, un imponente ventanal de grandes dimensiones se despliega hacia una extensa terraza, ofreciendo una conexión perfecta entre interior y exterior. Para añadir un toque de intimidad y protección, elegantes persianas de madera se deslizan sobre los sólidos muros de piedra.
La piscina, con su cautivadora paleta de tonos aguamarina y su revestimiento de gresite, se fusiona armoniosamente con un pavimento de gres porcelánico antideslizante que simula la madera. Este espacio se complementa con una zona de barbacoa, adaptable según las preferencias del usuario, y se accede a través de una área pavimentada que se integra de forma natural con el terreno circundante, creando un ambiente de continuidad y serenidad.