Esta impresionante residencia histórica, ubicada a pocos minutos del centro de la ciudad, es una verdadera joya arquitectónica del siglo XIX. Manteniendo su encanto original y una fachada protegida y catalogada como patrimonio arquitectónico insular, esta casa señorial es un testimonio vivo del pasado. Con una generosa superficie de más de 390 metros cuadrados, esta propiedad incluye un hermoso patio trasero y un sótano perfecto para una pequeña bodega. Su diseño se extiende a lo largo de la planta baja y el primer piso, con porches que añaden volumen adicional. La escalera central, una verdadera obra de arte estratégica, baña todas las estancias con una abundante luz natural. En su configuración actual, ofrece 9 dormitorios/estancias, un amplio salón/comedor, una sala de estar, una cocina y dos baños. Sin embargo, las posibilidades de reforma y personalización son infinitas, lo que permite adaptarla a las necesidades y preferencias individuales de los nuevos propietarios. Esta casa cuenta con una rica historia y una personalidad única que la distinguen. Aunque necesita una reforma, representa una oportunidad excepcional para transformarla en una residencia de ensueño. Se recomienda encarecidamente programar una visita para apreciar todo su potencial y belleza en persona.