Ático con encanto en la calle más tranquila del casco viejo con buena orientación y vistas.
Piso amplio y luminoso de un dormitorio, en el que se ha sacado un segundo dormitorio en el salón. Caldera de gas para agua caliente y calefacción, ventanas de madera y doble acristalamiento. Edificio construido el año 1993, en el que se ha reformado recientemente la cubierta y dispone de videoportero y ascensor a cota 0.