Responsable de comunicación en Indomio España
Si estás pensando en cómo crear un ambiente navideño en tu salón pero no sabes qué opción elegir o como conseguir una decoración unificada, es importante que empieces por elegir el estilo principal. Así, podrás articularlo todo alrededor de este punto y lograr una mayor homogeneidad.
Para ello, te dejamos a continuación los 5 estilos de decoración navideña más extendidos, para todos los gustos.
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Si te gusta la decoración navideña más tradicional, en la que el rojo y el verde predominan totalmente, este es tu estilo para el salón. Utiliza estampados de cuadros rojos en las almohadas y mantas del sofá, coloca decoraciones con ramas de pino y bayas rojas de acebo o busca unos calcetines rojos y verdes para colgar de tu chimenea o de alguna repisa o mueble.
Esta decoración puede ser perfecta para un salón neutro aunque, si tu salón tiene piezas muy coloridas (que no son verdes ni rojas), puede que la decoración choque. Si no tienes manera de cubrir estas piezas de mobiliario (por ejemplo, cambiar el color del sofá con una funda), tal vez sea mejor optar por otros estilos de decoración navideña.
El dorado es sin duda el otro gran color de la Navidad y crea un ambiente muy elegante y festivo. Lo mismo sucede con el plateado, aunque quizá sea algo menos común. Si optas por el brillo, puedes incluirlo en elementos como:
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Puedes combinar este tono dorado o plateado con el verde del árbol o de guirnaldas y centros de mesa de follaje o mezclarlo con algún otro tono secundario como un rosa o un azul pastel si quieres dar un toque sutil de color.
La decoración navideña también es para divertirse y cualquier color puede formar parte de ella. Por ejemplo, puedes convertir el azul en el control central de la decoración, con algunos elementos brillantes dorados y plateados. Tal vez prefieras decantarte por el rosa o los tonos naranjas y marrones. Para la decoración de estos tonos terrosos puedes utilizar ramitas de canela, piñas, rodajas de naranja desecada, ramitas o anís estrellado.
Otra opción interesante es el blanco, que recuerda a la nieve, tan característica del periodo navideño y puede combinarse con cualquier otro tono.
Si quieres que la decoración de tu salón para la Navidad se mantenga sencilla y minimalista, puedes dar un toque navideño algo más sobrio y sutil. Por ejemplo, puedes elegir tonos verdes apagados y añadir elementos como:
También puedes escoger algún candelabro o vela sencilla, que dan un toque cálido y navideño, una figurita para colocar en un rincón o un bote de cristal transparente lleno de bastoncillos de caramelo, galletitas navideñas, etc.
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En el lado opuesto, si te apasiona la navidad, también puedes ir hacia la exageración. Recargar el ambiente no suele ser buena idea en decoración, pero si los elementos se ubican correctamente la Navidad puede ser ese momento del año para pasar del minimalismo al maximalismo y deleitarte con todos esos adornos que te enamoran en las tiendas.
Aun así, te recomendamos tener en mente un estilo más o menos homogéneo para no terminar comprando demasiadas piezas que chocan entre sí. Dentro de un orden, puedes colocar en tu salón tanta decoración navideña como creas suficiente. Eso sí, ¡que no te pille el Grinch!