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Colaboradora de Indomio.es/news
Cuando se habla de filodendro, no se puede ignorar el maravilloso significado de su nombre, filodendro deriva, de hecho, del griego ϕιλόδενδρος que significa «amigo de los árboles».
Es un género de plantas aráceas con más de 200 especies de América tropical, pero extendidas por todas partes. Suelen ser arbustos o árboles trepadores, que también se cultivan especialmente en pisos, por la belleza de sus hojas exuberantes y brillantes.
Relativamente fácil de cultivar, el filodendro aporta un toque de frescura y vitalidad al hogar. Lee cómo cultivarlo en maceta y cómo cuidarlo.
El filodendro prospera en lugares luminosos, pero con luz indirecta, ya que los rayos directos podrían quemar sus hojas.
Por tanto, coloque la maceta en una habitación luminosa y cálida, sin exposición directa.
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El filodendro prefiere temperaturas moderadas de entre 18°C y 24°C, por lo que es adecuado para vivir en interiores.
Conviene evitar colocar la planta cerca de fuentes de aire caliente o corrientes de aire frío y mantener una humedad moderada alrededor de la planta, rociando de vez en cuando las hojas con agua para aumentar la humedad ambiental, que esta planta es capaz de captar gracias a sus raíces aéreas.
Riegue el filodendro regularmente durante los periodos más calurosos y con menos frecuencia durante los más fríos. Deje que la tierra se seque entre riego y riego y compruebe la tierra con el dedo antes de proceder: si está húmeda, espere antes de volver a regar.
Es importante evitar el exceso de agua, ya que el estancamiento puede provocar la pudrición de las raíces.
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La tierra que utilice debe estar bien drenada y ser rica en nutrientes para su filodendro.
Abone la planta en primavera y verano con un abono líquido equilibrado diluido hasta la mitad. Reduzca el abonado durante los meses de invierno, cuando la planta está inactiva.
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El filodendro no requiere una poda regular, pero puede ser necesaria para eliminar las hojas muertas o dañadas y para promover un crecimiento sano.
La poda puede realizarse en cualquier época del año y también se utiliza para controlar el tamaño o dar forma al crecimiento de la planta.
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