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Responsable de comunicación en Indomio España
Instalar una piscina en la propia terraza, transformando un espacio exterior en un oasis privado de relax y diversión, es el sueño de muchos. Sin embargo, antes de lanzarse a este proyecto, hay que abordar una cuestión crucial: reforzar la terraza, su estructura. El peso del agua, combinado con el de la piscina y los usuarios, puede poner a prueba la estabilidad de las losas, lo que requiere intervenciones específicas para garantizar la seguridad y la durabilidad. Aquí tienes una guía completa sobre cómo reforzar tu terraza para acoger una piscina y hacer realidad tu deseo, sin correr riesgos.
El primer paso es consultar a un ingeniero profesional, que examinará la estructura de tu terraza y determinará si puede soportar el peso de la piscina, del agua y de las personas que la utilizarán. Tras calcular la carga total que debe soportar, te proporcionará todas las respuestas a tus preguntas sobre cómo reforzar la terraza.
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Los suelos de las viviendas civiles, según la normativa técnica, están diseñados para soportar una carga accidental de 200 kg por metro cuadrado. Consideremos que el agua pesa aproximadamente 1000 kg por metro cúbico. Supongamos que desea instalar una piscina de 2 por 3 metros, con una profundidad de 1 metro: el peso del agua será de aproximadamente 6000 kg, sin contar el peso de la estructura de la piscina y de las personas que entrarán en ella. Puedes imaginarte lo indispensable que es reforzar el forjado de tu terraza.
Existen varias técnicas utilizadas por el ingeniero para reforzar la terraza. Puede añadir vigas de soporte de acero o madera resistente bajo el forjado para distribuir uniformemente el peso de la piscina, o reforzar las existentes con soportes adicionales o placas metálicas, un método eficaz para aumentar la capacidad de carga sin sustituir completamente las vigas. Así, podrás instalar una piscina con tranquilidad.
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Los materiales merecen una atención aparte. Si la terraza es de hormigón, puede ser útil añadir una capa de hormigón armado con malla metálica o barras de acero, ideal para mejorar la resistencia de la terraza a los esfuerzos. Si, por el contrario, es de madera, puede ser necesario sustituirla por materiales más resistentes, como el acero o el cemento, que pueden garantizar una mayor estabilidad. Por último, es esencial asegurarse de que la terraza está correctamente impermeabilizada con membranas de sellado de calidad para evitar infiltraciones de agua que podrían dañar la estructura.
Antes de empezar las obras, comprueba la normativa local sobre construcción y obtén todos los permisos necesarios para asegurarte de que el proyecto cumple las leyes y reglamentos pertinentes, evitando problemas de funcionamiento.
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