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En los últimos años, por diversas razones relacionadas con la política y la economía internacional, el coste del gas ha aumentado significativamente, dificultando la situación de muchas familias.
El gas se utiliza principalmente en los hogares para la calefacción, el agua caliente y para cocinar, actividades imprescindibles en la vida cotidiana.
En lo que respecta, en particular, al consumo de gas para cocinar, pocas personas saben cuánto se consume realmente. Veamos cuánto gas se consume para cocinar, cuánto cuesta y cómo ahorrar .
¿Cuánto gas se consume para cocinar?
El consumo real de gas depende del tipo de estufa utilizada, de la potencia y del nivel de llama. No hace falta decir que una estufa encendida a fuego alto consume más gas que una a fuego lento, durante el mismo tiempo de encendido.
De media, una cocina de gas doméstica, puesta a llama media o baja, consume aproximadamente entre 0,005 y 0,02 metros cúbicos de gas por minuto .
Algunos ejemplos
Para tener una idea de los costes, podemos usar ejemplos prácticos;
Si cocinas pasta, el tiempo medio necesario para cocinarla es de unos 10 minutos, por lo que el consumo de gas en este periodo de tiempo ronda los 0,00667 metros cúbicos.
Haciendo un cálculo basado en el precio medio del gas, te gastas unos 0,00236 euros en cocinar pasta.
En el caso de una cocción prolongada, por ejemplo de una hora, considerando el consumo de gas de alrededor de 1-2 metros cúbicos de gas, el coste varía entre 0,35 euros y 0,70 euros por hora.
¿Cómo ahorrar gas en la cocina?
Para intentar ahorrar lo máximo posible en el gas utilizado para cocinar, además de elegir cuidadosamente la empresa que ofrece el servicio conviene adoptar algunas medidas para optimizar el consumo :
- Mantener limpios los quemadores para no desperdiciar gas, desmontándolos periódicamente y limpiándolos con vinagre
- Tapar ollas y sartenes durante una cocción prolongada
- Ajustar correctamente la llama en relación al tamaño de la sartén
- No dejar el gas encendido más tiempo del necesario, por ejemplo al hervir agua.