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Responsable de comunicación en Indomio España
A menudo uno se pregunta cuántos litros de agua consume un lavavajillas y si realmente resulta económico en comparación con el lavado tradicional a mano. Las etiquetas energéticas de los electrodomésticos actuales ofrecen datos claros y sorprendentes sobre cuánta agua se utiliza por ciclo de lavado, lo que demuestra la eficiencia de estos aparatos. Entendamos juntos por qué tiene sentido utilizar un lavavajillas y cuál es su consumo real.
Lavar los platos a mano se percibe como un método que consume menos agua. Sin embargo, según un estudio de la Universidad de Bonn, los lavavajillas modernos sólo consumen la mitad de energía, una sexta parte de agua y menos detergente que lavando la misma cantidad de platos a mano.
Por término medio, los lavavajillas eficientes pueden consumir entre 6 y 19 litros de agua por ciclo, mientras que el lavado a mano puede requerir más de 76 litros de agua para lavar una carga completa de vajilla. Además, los lavavajillas están diseñados para funcionar a altas temperaturas (entre 60 °C y 63 °C), que son más eficaces para eliminar las bacterias y la suciedad que el lavado a mano, que no puede alcanzar temperaturas tan altas por razones de seguridad. Esto significa que los lavavajillas pueden ahorrar hasta un 80% de agua en comparación con el lavado a mano.
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También hay que tener en cuenta que los lavavajillas modernos ofrecen programas de lavado ecológico, diseñados específicamente para reducir el consumo de agua y energía. Estos programas funcionan a temperaturas más bajas con tiempos de lavado más largos y utilizan sólo entre 6 y 10 litros de agua por ciclo. Por el contrario, los ciclos tradicionales utilizan temperaturas más altas y consumen entre 10 y 15 litros de agua, pero siguen siendo ideales si hay que lavar vajilla muy sucia.
La eficiencia hídrica de los lavavajillas no sólo reduce el consumo de agua, sino que también contribuye a una reducción significativa de las facturas de servicios públicos. Además de ahorrar agua, el uso del lavavajillas también tiene un impacto positivo en la contaminación ambiental. Estudios realizados por la Escuela de Medio Ambiente y Sostenibilidad de la Universidad de Michigan han demostrado que, a lo largo de una década, el lavado a mano produce el doble de gases de efecto invernadero que el uso del lavavajillas, debido a la energía necesaria para calentar el agua.
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Además de los beneficios económicos y medioambientales, los lavavajillas ofrecen resultados superiores en términos de higiene. Incluso en los ciclos eco, el agua alcanza temperaturas superiores a las que tus manos pueden soportar, garantizando una higiene perfecta en el lavado de la vajilla. Lo importante es cargar correctamente el lavavajillas para maximizar la eficacia del lavado.
Teniendo en cuenta la eficiencia del agua y los beneficios ecológicos y económicos, los lavavajillas modernos son una opción ventajosa frente al lavado a mano. Utilizar un lavavajillas no sólo ahorra agua y reduce las facturas de los servicios públicos, sino que también contribuye a reducir la contaminación ambiental, al tiempo que ofrece un alto nivel de higiene para la vajilla.
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