Responsable de comunicación en Indomio España
Los alquileres son una inversión habitual consistente en comprar una vivienda para después alquilarla y obtener con ello una rentabilidad. Para calcular esta rentabilidad hay que tener en cuenta distintos factores y variables, por lo que a continuación te dejamos una lista detallada de todos los gastos que debes de tener en cuenta.
Podríamos pensar que para calcular la rentabilidad del alquiler solo necesitamos saber el precio del piso y la cuota del alquiler, pero lo cierto es que hay otras muchas variables a tener en cuenta.
La compra de una casa conlleva más gastos que el simple importe, como los gastos de notaría, el registro de la propiedad, el impuesto por vivienda de obra nueva si lo fuera, los impuestos por compra de una vivienda usada, los costes de tasación, etc. En total, estos gastos pueden ascender alrededor del 10% del valor del piso y hay que tenerlos muy en cuenta.
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Si se trata de una vivienda de segunda mano es probable que tengas que hacer arreglos en mayor o menor medida, lo que incidirá en los gastos y, por tanto, en la rentabilidad del alquiler. Además, puede que necesites comprar mobiliario, electrodomésticos, etc.
Además de estos gastos iniciales habrá que tener en cuenta gastos recurrentes como los impuestos del piso (el IBI, la basura, etc.), la comunidad, los seguros de la vivienda y otros gastos de mantenimiento. Es normal que en un piso de alquiler sea necesario hacer reparaciones, pitar o sustituir electrodomésticos de vez en cuando, así que habría que apuntar una pequeña partida para estos imprevistos.
Para calcular la rentabilidad podemos hacerlo en bruto o en neto:
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Hablamos de cuánto ganaremos con esta inversión sin contar el pago de la vivienda. Para obtener esta cifra tendrás que tomar los ingresos anuales (es decir, el alquiler que recibirás cada año) y dividir por el coste de la vivienda (el precio inicial, los impuestos y las reformas).
Posiblemente esta cifra te interese más, ya que es lo que ganas de verdad y para obtenerla habrá que hacer el cálculo anterior pero descontando también el resto de gastos anuales de la casa.
Por último, puede ser útil calcular no solo la rentabilidad del alquiler sino también las entradas y salidas de efectivo para saber en qué estado te dejará la inversión. Para calcular la entrada o salida de efectivo por año simplemente tendrás que tomar los ingresos y restar tanto el pago de la hipoteca como el resto de gastos del año. Para hacerlo mensual será la misma resta, aunque tendrás que prorratear si existe algún gasto anual (por ejemplo si pagas el seguro de forma anual, tendrás que dividirlo entre 12).
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