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Responsable de comunicación en Indomio España
La Reserva Federal (Fed) siguió los pasos del BCE (Banco Central Europeo) al anunciar una bajada de los tipos de interés en Estados Unidos de aquí a 2025. Esta medida responde a las presiones económicas, con el objetivo de estimular la economía y paliar los efectos de una posible desaceleración.
Pero, ¿cuáles son las implicaciones para las hipotecas en EEUU? Intentemos comprender lo que está ocurriendo en el mundo de la economía y las finanzas occidentales.
La Fed, el banco central de Estados Unidos, anunció por sorpresa una bajada de los tipos de interés de 50 puntos básicos (un 0,25% menos), lo que supone un recorte del tipo de referencia en una horquilla entre el 4,75% y el 5%.
Como se ha dicho, la misma decisión habían tomado recientemente las altas instancias de la Eurotower de Francfort (sede del BCE) tras meses de subidas para contener el termómetro de la inflación, siempre en alza, y tratar así de estabilizar los precios al consumo en la Unión Europea.
En América la situación es diferente, con datos que revelan un escenario macroeconómico más sólido que en los países de la UE. Veamos qué previsiones se esperan.
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La bajada de los tipos de interés tiene un impacto positivo directo en las hipotecas, especialmente en las de tipo variable. Con tipos de interés más bajos, se reduce el coste de financiación de la compra de vivienda, lo que hace que las hipotecas sean más asequibles para los consumidores.
Las hipotecas a tipo fijo, por su parte, podrían cambiar poco en un futuro inmediato, aunque un plan de financiación activado hoy podría beneficiarse precisamente de las rebajas en cuanto se activen.
He aquí cómo podría afectar este cambio a las hipotecas:
Los tipos de interés representan el coste del dinero. Significa que cuando una persona pide un préstamo o contrata una hipoteca, paga un tipo de interés que representa el «precio» por pedir prestado ese dinero. Así pues, cuando un banco central (ya sea la Reserva Federal o el BCE) decide recortar el tipo de interés básico, suele hacerlo porque la inflación (el coste de la vida) por fin está bajando.
Después de una, o varias, bajadas de tipos, los bancos pueden ofrecer préstamos e hipotecas a un tipo más bajo, y más ventajoso, a los compradores de vivienda que soliciten un préstamo. En general, la bajada de tipos se utiliza después de varias subidas para estimular el crecimiento económico fomentando el crédito y la inversión.
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El recorte anunciado por la Fed tendrá efectos similares en las hipotecas a los observados en Europa, con una posible reducción de los costes para los prestatarios, aunque el entusiasmo en Bruselas sigue pareciendo más cauto. Tanto porque el BCE sigue un enfoque de la política monetaria ligeramente diferente al de Estados Unidos, pero sobre todo porque la Unión Europea tiene que hacer frente a un entorno económico más difícil, y a unas condiciones de crecimiento desiguales entre los Estados miembros, además de a una situación internacional cada vez más incierta.
En resumen, un recorte de los tipos de interés suele tener las siguientes consecuencias:
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