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Responsable de comunicación en Indomio España
Una nueva norma nace en el sector turístico, y es que a partir del día 1 de octubre se planteaba que las empresas turísticas tendrían que aportar los datos de sus clientes al Ministerio del Interior. Una medida que ha levantado algunas críticas o quejas por parte de agencias de viajes y otros actores dentro del sector, lo que ha llevado a retrasar la fecha al menos hasta diciembre.
El principal motivo del Ministerio del Interior para recoger este tipo de información es la seguridad, ya que se quieren evitar actividades relacionadas tanto con el terrorismo como con organizaciones criminales de distinta índole, para lo que es muy relevante la información de las reservas turísticas en nuestro país.
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En este sentido, se solicita una gran cantidad de información de los viajeros, algo que levanta numerosas quejas por la dificultad de entregar estos datos.
Entre los datos que pide Interior con la nueva normativa encontramos nombre y apellidos, documento identificativo (DNI o pasaporte), carnet de conducir (para los servicios de vehículos de alquiler), nacionalidad, dirección de la residencia habitual, fecha de nacimiento, información de contacto (teléfono y email) e incluso relación entre los viajeros (si hay parentescos y de qué tipo).
Como comentamos, las principales quejas giran en torno a la dificultad para cumplir con la norma, ya que las agencias no siempre disponen de todos los datos ni poseen la infraestructura suficiente para comunicarlo sin que esto suponga un inmenso coste administrativo. Según el Consejo de Turismo, no hay a día de hoy una correcta adaptación tecnológica para transmitir estos datos de forma más automática y los principales afectados serán aquellas pequeñas y medianas empresas, tanto por la menor disponibilidad de personal para encargarse de la tarea como por los sistemas informáticos probablemente menos avanzados para el registro y la gestión de los datos.
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Además de todo esto, el sector turístico alega que las empresas que prestan el servicio final, como los hoteles y el resto de empresas de hospedaje y alquiler de vehículos ya se encargan de facilitar estos datos, por lo que se produce una duplicidad que consideran innecesaria.
Ante las reclamaciones anteriores, las agencias de viajes (sus representantes de Ceav, Acave, Fetave y Unav), así como el Consejo de Turismo de la CEOE, piden alinear la normativa con el resto de Europa y llegan a solicitar que se suspenda el decreto para evitar los efectos negativos sobre el sector.
Por todo esto, la fecha de entrada en vigor del registro obligatorio de la información de viajeros se ha pospuesto a diciembre y veremos si, llegada esta fecha, existe un punto de encuentro entre todos los interesados.
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