Responsable de comunicación en Indomio España
En los últimos años, el coste de la vida en las principales ciudades del mundo se ha convertido en una cuestión cada vez más relevante, con centros urbanos que se enfrentan a un crecimiento espectacular de los precios de bienes y servicios. En este artículo, exploramos cuáles son las ciudades más caras del mundo en 2024, analizando las 10 principales metrópolis donde vivir o simplemente quedarse puede pesar más en el bolsillo.
Esta clasificación se basa en una combinación de factores, como los precios de los alquileres, el coste del transporte, el precio medio de los productos de primera necesidad y el nivel de vida general. De Tel Aviv a Hong Kong, pasando por capitales europeas y asiáticas, descubrimos qué destinos son los más caros y qué hace que los gastos diarios de residentes y visitantes sean tan elevados.
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Este año, Zúrich ocupa el primer puesto entre las ciudades más caras del mundo. La fortaleza del franco suizo, combinada con los elevados precios en varias zonas, contribuye a que el coste de la vida sea excepcionalmente alto. A pesar de ello, Zúrich también se mantiene entre las ciudades más habitables, ocupando el tercer puesto mundial según un informe de la Economist Intelligence Unit, sólo por detrás de Viena y Copenhague.
Con cerca de 6 millones de habitantes, Singapur es la segunda ciudad más cara del mundo. Desde hace varios años, el coste de la vida en la ciudad-estado es particularmente elevado, con precios muy altos para el transporte y la ropa en particular.
Ginebra también sigue la misma tendencia que las ciudades anteriores; los impuestos más altos de Suiza contribuyen al coste de la vida en general. De hecho, los precios de la vivienda han subido tanto que traspasan la frontera francesa, donde la no especialmente conocida localidad de Annemasse registra un precio medio por metro cuadrado de unos 3.500 euros.
Nueva York, que ha dominado la clasificación en el pasado, sigue manteniendo una posición destacada, situándose todavía entre las ciudades más caras del mundo, junto con Ginebra. La razón principal es la subida del dólar, considerado un refugio seguro en tiempos de incertidumbre mundial. Desde hace varios años, vivir en la Gran Manzana o incluso visitarla supone un gasto considerable, lo que convierte a la ciudad en uno de los destinos más caros a escala internacional.
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La ciudad, repartida en 260 islas montañosas, sufre escasez de suelo edificable, lo que estimula la especulación en el sector inmobiliario. Además, Hong Kong sólo produce el 2% de los alimentos que consume, factor que encarece considerablemente el coste de la comida, encareciendo aún más la vida cotidiana.
Al igual que Nueva York, la subida del valor del dólar contribuye a situar a Los Ángeles entre las ciudades más caras del mundo. Según datos del Council for Community and Economic Research, el coste de la vida en la ciudad californiana es superior al del 94% de las demás metrópolis mundiales, lo que consolida su reputación como uno de los destinos más caros a nivel internacional.
Puede sorprender que París ocupe «sólo» el séptimo lugar en la lista de las ciudades más caras del mundo. Aunque los precios en la capital francesa han subido en los últimos años, es sobre todo el tipo de cambio, con el euro relativamente débil, lo que explica su descenso en la clasificación. Esto ha contribuido a reducir la diferencia con respecto a otras metrópolis mundiales.
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Tel Aviv perdió el primer puesto en la clasificación de las ciudades más caras, que había ocupado en 2022, debido a la alta inflación y a una moneda más fuerte en los dos años anteriores al inicio del conflicto entre Israel y Hamás. A pesar de este descenso, la ciudad sigue estando entre las diez metrópolis más caras del mundo.
La capital danesa, Copenhague, se caracteriza por una política fiscal especialmente estricta, con un impuesto del 25% sobre bienes y servicios, además de impuestos adicionales sobre productos como el tabaco, el alcohol y el chocolate. Cabe destacar que Copenhague ocupa el segundo puesto en la clasificación de las ciudades más habitables del mundo elaborada por The Economist Intelligence Unit, un factor que podría explicar el alto coste de la vida en la ciudad.
La segunda ciudad californiana de la clasificación, y tercera de Estados Unidos, es San Francisco; conocida por ser una de las más caras del mundo en bienes de consumo e inmuebles, los precios siguen disparándose. Sin embargo, es probable que la ciudad descienda en la clasificación en los próximos años debido a la grave crisis de opioides a la que se enfrenta, que está teniendo importantes repercusiones en la calidad de vida y la economía local.