Índice de contenidos
El Palacio de Schönbrunn es una de las construcciones más espectaculares de Viena, en Austria, con sus 1441 salas y 120 hectáreas de bonitos jardines. Situada a orillas del Danubio, lo cierto es que esta ciudad acoge más de una construcción monumental, ya que podemos destacar también Hofburg o el Belvedere como visitas indispensables en la capital austriaca.
Conozcamos a continuación un poco más sobre la historia del Palacio de Schönbrunn, sus espectaculares jardines y cómo visitarlo.
Historia del Palacio de Schönbrunn: desde 1569 a 1819
Si nos centramos en el aspecto neoclásico actual de la construcción, con su particular color amarillento, podemos decir que esta estética se adoptó en el palacio entre 1817 y 1819 de la mano de Johann Aman.
LEE TAMBIÉN: Palacio Real de Madrid, historia, cambios de guardia y uso a día de hoy
Sin embargo, la historia del terreno sobre el que se sitúa va mucho más allá y la primera construcción data de 1569, momento en el que había en este mismo lugar un palacio de caza mandado construir por Maximiliano II pero del que no quedó nada tras la batalla de Kahlenberg entre el Sacro Imperio Germánico y el Imperio Otomano.
Entre el 1696 y el 1701 se construiría un nuevo palacio, esta vez encargado por Leopoldo I al arquitecto Johann Bernhard Fischer von Erlach. Sin embargo, fue más tarde cuando el palacio se amplió bajo las órdenes de María Teresa y del antiguo palacio tan solo se conservaron la Capilla y la Escalera Azul.
La construcción de palacio actual fue llevada a cabo por Johann Ferdinand Hetzendorf von Hohenberg, artífice también de la glorieta que encontramos en sus jardines, uno de los lugares más bonitos desde el que contemplar el complejo palaciego.
LEE TAMBIÉN: Pera Palace Hotel, el hotel donde Agatha Christie escribió “Asesinato en el Orient Express”
Por último, Johann Aman terminó la fachada de Schönbrunn con el característico estilo neoclásico actual.
Los jardines del Palacio de Schönbrunn
Si bien la residencia de verano de los Habsburgo, el Palacio de Schönbrunn, merece una visita por dentro para recorrer todas sus salas, lo cierto que incluso verlo desde fuera ya merece la pena. Al visitar Viena, dirígete a La Glorieta, en el parque del palacio y disfrutar de la vista o tomar unos dulces en su pequeño café.
Para los visitantes en primavera, estos jardines te ofrecerán un paisaje aún más espectacular, que ningún visitante debería de perderse.
¿Cómo visitar el Palacio de Schönbrunn?
Para visitar el Palacio de Schönbrunn en Viena necesitarás adquirir una entrada y en este sentido hay distintas webs que ofrecen experiencias alrededor del palacio, como conciertos y cenas en el mismo o visitas guiadas. También podrás acceder de forma gratuita si previamente has adquirido el Vienna Pass, una tarjeta que permite la entrada a más de 70 atracciones en Viena.
LEE TAMBIÉN: ¿Cuáles son las mejores playas de Valencia?