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Responsable de comunicación en Indomio España
El famoso Parlamento de Budapest, uno de los símbolos de la ciudad, es en realidad el Parlamento de Hungría y de hecho la traducción de su nombre en húngaro (Országház) es literalmente «Casa del País«. Se trata de un edificio que aparece en todas las postales y que, al anochecer, se ilumina creando una estampa que atrae a millones de turistas cada año.
Conozcamos más en profundidad las características arquitectónicas del Parlamento, su historia y su uso en la actualidad.
Para definir el estilo arquitectónico, podemos decir que el Parlamento de Hungría tiene un estilo eminentemente neogótico, aunque con algunos rasgos renacentistas y barrocos. Además, si nos fijamos bien, veremos cierto parecido con el Palacio de Westminster (el Parlamento en Londres), en el que se inspira su diseño.
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Por ejemplo, si nos fijamos en su cúpula central esta es de estilo renacentista y su fachada simétrica también es signo de la influencia de la época renacentista. Por otro lado, las vidrieras, los arcos ligeramente apuntados y las torrecillas afiladas son símbolos de la arquitectura gótica.
El edificio mide nada menos que 268 metros de largo y 123 metros de ancho y tiene un total de 691 habitaciones, 27 puertas de entrada y 10 patios. Además, cuenta con 242 esculturas en su fachada, lo que nos indica la magnitud de la obra arquitectónica.
El edificio del Parlamento se inauguró en el año 1894, pero lo cierto es que en este momento aún no estaba terminado y no sería hasta 1904 cuando finalizó la gran obra arquitectónica. El arquitecto encargado de diseñarlo fue Imre Steindl y tuvo influencias de Friedrich von Schmidt, encargado de construir la iglesia Gótica de Nuestra Señora de la Victoria en Viena.
Una original demanda en la construcción del Parlamento que su arquitecto debía de cumplir era la utilización de materiales nacionales exclusivamente, motivo por el que la economía húngara floreció durante la época de construcción, para proveer de materiales como los 40 millones de ladrillos necesarios para levantar el edificio.
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En el interior del Parlamento de Budapest encontramos materiales nobles como el mármol y el oro que predominan en la decoración y su sala más famosa es la hexadecagonal, que da paso a la Cámara Baja y la Cámara Alta de la Asamblea Nacional de Hungría. En el ala norte encontramos la oficina del Primer Ministro húngaro y en el ala sur está la del Presidente de la República.
Los precios para entrar al Parlamento varían en función de si se es ciudadano de la European Economic Area o no y existen algunos descuentos para estudiantes y niños menores de 6 años. El horario varía según la época del año, así que lo mejor es comprobarlo cuando vayas a hacer la visita y reservar las entradas con tiempo. También son interesantes los tours guiados, que permiten comprender mejor la historia de la ciudad y de este edificio.
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