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Responsable de comunicación en Indomio España
Si te has cansado de los colores planos o sencillos en las paredes y buscas dar un toque diferente y especial a la casa, las opciones son infinitas. A continuación te traemos algunas ideas para pintar paredes que llaman la atención, con distintos efectos y para cualquier estilo de hogar. Esta tarea podrás llevarla a cabo por ti mismo si tienes algo de mano o buscar a algún pintor profesional que te ayude, sobre todo para las opciones más complicadas.
La primera idea para pintar paredes está muy de moda y son las formas geométricas o irregulares que crean una parte de un color diferente en la pared. Por ejemplo, un rectángulo o un semicírculo detrás del escritorio.
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Si quieres dibujar estas formas, tendrás que pintar primero el color base de la pared y, una vez seco, puedes utilizar cinta de carrocero para delimitar la forma que deseas en la pared. Así será más fácil conseguir líneas limpias y regulares e incluso visualizar el tamaño y lugar donde quedará la forma de color.
Otra opción para pintar paredes muy creativa es hacer un efecto de pared de ladrillo de cualquier color. Por ejemplo, sobre una pared verde oscuro, puedes hacer sombras blancas colocadas como los ladrillos. Para ello necesitarás una esponja rectangular con una medida adecuada que irás humedeciendo en pintura y marcando por filas en la pared. Para conseguir el efecto deseado, las filas no deben de quedar con los ladrillos rectos unos sobre otros, sino intercalados (como cualquier pared real).
Algo más atrevidos son los relieves en la pared. Si tienes una pared lisa, puedes utilizar una plantilla recortada, por ejemplo con forma de flor o estrella, para crear relieves en una columna, en la pared, etc. Solo tienes que colocar la plantilla sobre la pared lisa (la plantilla debe de tener algo de grosor) y pasar el yeso por encima. Una vez se seque, podrás pintar la pared al completo y tendrás unas sutiles formas en relieve.
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Otra tendencia en paredes originales es la pintura de un solo color pero irregular. La técnica para pintar así las paredes es, literalmente, a brochazos en diferentes direcciones para que la pintura no quede lisa. El efecto es una pared con distintos matices del mismo color, fresca y dinámica y puede utilizarse en cualquier color: desde el gris hasta el amarillo, pasando por el azul.
Hoy en día existen en el mercado soluciones como los rodillos con distintas formas y relieves que, al pasarlos con cuidado sobre una pared lisa, dejan un bonito estampado. Para utilizarlos hay que tener algo de paciencia y pulso, ya que es importante hacer una sola pasada, con mano firme, para que el dibujo quede perfecto.
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