Colaboradora de Indomio.es/news
Los años 80 fueron una época caracterizada por los colores vivos y el diseño atrevido. Amueblar una casa al estilo de aquellos años significa abrazar su extravagancia y dejarse llevar por su energía contagiosa, combinando colores, materiales y accesorios con estilo.
En este artículo, hemos reunido todos los consejos útiles para viajar en el tiempo a ese momento histórico en el que las casas sabían ser atrevidas y destacar con un toque de excentricidad.
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Los años 80 se caracterizaron por el uso de tonos como el rosa chillón y el amarillo chillón, que dominaban los interiores, a veces incluso en variantes neón.
Escoge un color llamativo para dar personalidad a tus paredes o incluso más de uno que contraste. ¿Un ejemplo práctico? Prueba con azul y rojo o amarillo y morado.
La mezcla no sólo es la consigna cuando se trata de colores, sino también en la elección de materiales.
Así, en la casa de los 80, el acero inoxidable se une al cristal, los suelos de mármol pulido desafían a los paneles de madera, los sofás y muebles de cuero se combinan a las mesas de metal.
Las combinaciones asombran y convencen.
La esencialidad no estaba en casa en los años ochenta, ni mucho menos. En aquella época, los accesorios desempeñaban un papel importante: no faltaban lámparas colgantes de atrevidas formas geométricas y grandes candelabros, alfombras mullidas, cojines con estampados florales de gran tamaño y espejos con marcos coloridos y extravagantes. No te pierdas un bonito candelabro metálico.
¿Y los adornos? Espacio para figuritas de cerámica de colores vivos y relojes de pared con formas futuristas. El salón es el corazón palpitante de la casa de los 80, donde más puedes desplegar tu creatividad.
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La cocina también es una habitación importante y se convierte en un punto de encuentro y convivencia para toda la familia.
Por eso son tan populares las cocinas península, verdaderos rincones de convivencia.
Super populares incluso en los últimos tiempos, las letras de neón explotaron en los años 80, añadiendo un toque de glamour y modernidad a los interiores.
Escribe en la pared lo que más te emociona o haz un auténtico póster con las letras «Back to the 80’s» para una entrada a la casa realmente escénica.