Responsable de comunicación en Indomio España
Un techo demasiado alto puede dar a las estancias de una casa una sensación de dispersión que las haga parecer incómodas.
Sin embargo, con algunos trucos sencillos y de diseño, es posible bajar visualmente el techo y crear un ambiente más acogedor e íntimo.
La elección de los colores desempeña un papel fundamental en la percepción de la altura de una habitación. Optar por colores oscuros para el techo permitirá dispersar menos la estancia y crear un ambiente acogedor. Esto es especialmente útil cuando se trata de una habitación pequeña y especialmente alta.
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Por el contrario, elegir tonos claros y luminosos, como el blanco, el beige o los colores pastel, ayudará a ampliar visualmente el espacio y dará sensación de ligereza a una habitación con techo bajo.
La iluminación desempeña un papel importante en la percepción del espacio. Elegir lámparas colgantes voluminosas y cercanas al techo podría acentuar el techo bajo.
En cambio, elegir focos empotrados o apliques de pared ayuda a difuminar la luz para que el techo parezca más alto.
La elección de los muebles y accesorios también puede contribuir a rebajar visualmente el techo. Los muebles altos pueden hacer que el techo parezca menos alto y, por tanto, la habitación menos esbelta.
Preferir, en cambio, muebles bajos y lineales podría favorecer la sensación de ligereza, incluso en una habitación con techo bajo.
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Los tejidos y las cortinas también pueden influir en la percepción de la altura. Las cortinas con volantes o adornos vistosos podrían contrarrestar la sensación de dispersión.
Otros consejos:
Lo importante es crear un entorno armonioso y equilibrado, un ambiente acogedor donde todos los elementos contribuyan a una sensación de bienestar y relajación.