Colaboradora de Indomio.es/news
Cuando se decide utilizar el color blanco en el hogar, la gente suele subestimar el hecho de que existen diferentes tipos de esta tonalidad.
Pintar las paredes de blanco ayuda a crear un ambiente más luminoso y espacioso, por lo que es un color ideal si se dispone de poco espacio o de escasa iluminación natural.
Descubre, pues, cómo utilizar el blanco en casa y sacarle el máximo partido.
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El blanco puede utilizarse como elemento de contraste. Por ejemplo, puede pintar una pared de blanco y las otras de un color más oscuro o más claro.
También puede utilizarse para resaltar los elementos arquitectónicos de una habitación, como vigas vistas, columnas o ventanas.
En una habitación pequeña, el blanco puede ayudar a crear una ilusión de espacio. Se pueden pintar las paredes de blanco y añadir toques de color con muebles y accesorios.
En una habitación con poca luz natural, el blanco total puede ayudar y hacerla más luminosa. Se pueden añadir plantas u otros elementos naturales para aportar color y vitalidad a la habitación.
En una habitación con un ambiente caótico, el blanco puede ayudar a crear una sensación de orden y tranquilidad. Añadir muebles y accesorios en colores neutros o de paleta suave ayuda a crear armonía, haciendo más cálido el ambiente.
En cualquier caso, la elección de utilizar el blanco en el hogar puede afectar no sólo a las paredes, sino también a puertas, ventanas, muebles y accesorios de decoración. Veamos cómo orientarnos.
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Los muebles lacados en blanco, de líneas sencillas y enriquecidos con pequeños detalles de acero, como tiradores y marcos, ayudan a crear un aspecto moderno y de diseño sin necesidad de añadir color.
Si también quieres poner blanco en el suelo, es mejor que no elijas un blanco puro, sino que optes por un color leche o gris paloma, el efecto luminoso estará ahí, pero sin deslumbrar. Este tipo de suelo de resina, baldosa o parquet teñido hará que su hogar sea realmente único.
Para un ambiente totalmente blanco, las puertas blancas son imprescindibles.
Cuidado, los rodapiés deben ser absolutamente del mismo blanco.
Utilice telas blancas para cortinas, cojines, alfombras y mantas para dar un toque de elegancia y ligereza a las habitaciones.
Blanco para tapicerías, efecto frío en lino, o efecto cálido en lana bouclè.
También puedes añadir alfombras blancas o felpudos en tonos blancos para dar un toque exclusivo.
Añade detalles blancos a tu decoración con accesorios como lámparas, marcos de cuadros, jarrones y objetos decorativos.
Estos pequeños acentos blancos pueden crear un interesante contraste con los demás colores de la habitación y hacerla más alegre y luminosa.
Utiliza la iluminación blanca para crear un ambiente luminoso y relajante optando por lámparas colgantes, focos o lámparas de mesa con luz blanca.
Es posible combinar diferentes blancos, sin embargo, es preferible combinar blancos cálidos (de leche a la mantequilla, de nata a las natillas) y no mezclarlos con blancos fríos, como el color del hielo.
Así pues, puedes mezclar blancos cálidos entre sí o contraluces fríos entre sí.