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Responsable de comunicación en Indomio España
No siempre es fácil conseguirlo, porque hay que calibrar cuidadosamente los distintos estilos para evitar un efecto confuso, pero con los consejos adecuados dominarás la decoración mix and match sin riesgo de cometer errores.
¿Qué es el mix and match? ¿Y cómo decorar tu casa con mix and match? Averigüémoslo.
Puede que aún no hayas decidido qué estilo dominante prefieres o te representa mejor, por lo que mezclar y combinar es la forma perfecta de experimentar y encontrar tu mood en el diseño de interiores.
Sencillamente, te gusta mezclar diferentes estilos para crear un ambiente único, personalizado y con carácter.
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Esta tendencia moderna se remonta en realidad al siglo XVII. Fue la moda la que introdujo el mix and match, que pronto se extendió a otras artes, incluido el mobiliario.
Consiste en mezclar diferentes estilos yuxtaponiendo elementos de distintas culturas, lugares y épocas, así como colores contrastados y materiales inesperados. El resultado es siempre muy personalizado.
Sin embargo, no hay que subestimar ciertos aspectos.
¿Cuál es la mejor forma de conseguir la combinación perfecta? Empieza por lo que te gusta y ten en cuenta las necesidades de quienes tienen que habitar el espacio. No busques el efecto estético a costa de la funcionalidad.
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Una buena estrategia es empezar con un único elemento en torno al cual construir toda la habitación, creando contrastes a partir de él. Después, amplía gradualmente las combinaciones al resto de la habitación o quizá a toda la casa.
Antes de empezar, crea un tablero de inspiración o moodboard, recopilando imágenes de habitaciones o muebles concretos que te gusten. Lo importante es que cada elección esté pensada para no caer en la mezcla caótica de cosas desordenadas.
Además de yuxtaponer diferentes estilos, también puedes atreverte con los materiales contrastándolos. Por ejemplo, combinando el aire industrial del hierro con la calidez de la madera o la textura rugosa del lino con el brillo sedoso del satén.
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Los colores también vienen en nuestra ayuda: puedes crear una pared que contraste con papel pintado estampado o teñir las sillas de la cocina de distintos colores.
Otra estrategia ganadora es mezclar elementos de distintas épocas.
¿Algunos ejemplos? Una consola antigua o una araña de cristal en un salón moderno o un sillón de diseño colorido en un estudio de estilo minimalista.
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