Responsable de comunicación en Indomio España
A la hora de alquilar un piso para estudiantes, hay algunas particularidades con respecto a, por ejemplo, un alquiler habitual. Para empezar, es improbable que cuenten con su propio mobiliario, por lo que buscarán pisos amueblados para comprar lo mínimo posible. Además, suelen compartir piso y no vivir de forma individual, punto a tener en cuenta. Por último, sus necesidades, su rutina o su ritmo de vida también varían, así que veamos a continuación 5 tips clave para amueblar un piso de alquiler para estudiantes.
Sin duda, los estudiantes valorarán que el dormitorio no sea solo un espacio de descanso con una cama, sino que cuente al menos con un pequeño escritorio para el tiempo de estudio en la intimidad de la habitación. Una mesita, una silla y tal vez una pequeña estantería o cajonera serán de gran ayuda para la comodidad de los residentes.
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En un piso para estudiantes no suele sobrar ningún tipo de menaje. Hablamos de personas que, probablemente, nunca han vivido solas y no cuentan por tanto con sus propios utensilios (como sartenes, batidoras, cubiertos, cortinas, lamparitas, etc.).
Si van a vivir varias personas en la casa, es importante que haya espacio de almacenamiento para todos, armarios, cajoneras y estanterías para que no reine el desorden y todo quede en su lugar. Si cada uno puede tener un pequeño espacio privado de almacenaje, mejor que mejor.
Es interesante colocar un sofá amplio y cómodo, sillas suficientes o una mesa de salón grande, pero no parecen recomendables los materiales más delicados como el cristal, el terciopelo o ciertos tipos de madera. Puedes incluso dejar colocada una funda nueva para el sofá, que proteja el tejido original, o dejar un mantel impermeable como regalo. Te costará unos pocos euros pero puede salvar tu mesa de manchas y otros accidentes.
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Por último, en un piso para estudiantes los horarios pueden ser muy variables, con entradas y salidas, momentos de descanso mezclados con otros de ocio y esto puede dar lugar a ruidos. Aunque por supuesto lo mejor es tener las paredes lo más aisladas posibles para que no se molesten entre sí o a los vecinos, hay pequeños detalles como colocar alfombras que ayudarán a amortiguar el ruido y, al mismo tiempo, protegerán el suelo de manchas, golpes y rozaduras. Esta solución es especialmente interesante si el suelo del piso es de parqué o algún material similar que se estropee con facilidad.
En cualquier caso, opta siempre por un mobiliario lo más neutro posible: ya se encargarán los inquilinos de elegir la decoración acorde a su estilo, algo que es mucho más fácil si elegimos elementos simples sin muchos ornamentos.