
Responsable de comunicación en Indomio España
Llega el verano, te vas una semana a la playa y cuando vuelves a casa, encuentras tus plantas secas y tal vez insalvables. En el mejor de los casos, has tenido que pedir favores a un vecino o familiar y le has obligado a pasar la semana entrando y saliendo de tu casa. Ante estos problemas, te traemos algunas soluciones para regar las plantas en vacaciones y conseguir que sobrevivan al periodo estival.
En el mercado hay macetas que ya vienen preparadas para almacenar agua y que tu planta pueda ir absorbiéndola poco a poco. Por lo general, su uso es tan sencillo como llenar de agua el depósito que incluyen y listo.
Sin embargo, es posible que ya tengas tus plantas en macetas convencionales y no sea el momento de trasplantar, así que también tenemos algunas soluciones para estos casos.
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Coge una botella de plástico y corta la base. Después, con el tapón cerrado, haz unos agujeros lo más pequeños posibles en el cuello de la botella e introdúcela boca abajo en la tierra, vacía.
Por último, llénala de agua por la parte superior que hemos cortado previamente. Así, el agua se irá absorbiendo poco a poco, aunque debes tener en cuenta que este método no te dará demasiados días de riego.
Otra opción similar es coger una botella o garrafa y hacerle un agujero pequeño en el tapón, de manera que al llenarla y colocarla boca abajo, esta goteé pero no aparezca un chorro constante.
A continuación tendrás que ingeniártelas para colgarla sobre la maceta de la planta que necesitas regar, por lo que este método solo es apto si tienes la posibilidad de atarla a algún lado de tu terraza o jardín. Como es lógico, el tiempo que dure el riego dependerá del tamaño del recipiente que utilices.
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Una opción mucho más confiable y que no tiene un gran coste es comprar un sistema de riego por goteo a través de una goma, ya preparado para todas tus plantas.
Por ejemplo, en Amazon tienes packs completos por menos de 20€ que te permitirán irte de vacaciones tranquilo y que son muy fáciles de instalar.
Tal vez a esta técnica no podamos definirla como «regar», pero el agua gelificada puede ser un gran recurso. Solo tienes que colocarla sobre las macetas y estas irán absorbiendo poco a poco la humedad. Podrás encontrarla fácilmente en marketplaces o tiendas dedicadas a la decoración y la jardinería.
También puedes usar, como alternativa, las perlas que se hinchan con el agua y que suelen tener fines decorativos. Estas tendrán un efecto muy similar al del agua gelificada.