Fantástica finca de 10.000 m2 para disfrutar del ambiente rural. Muy bien comunicada y cerca del anillo insular. La casa de 200 m2 consta de dos plantas, data de principios de 1900 y está restaurada, orientada al sur, tiene un patio con jardineras y piedra original, dos salones, dos habitaciones, un baño, cocina, bodega y un aljibe. Dentro del terreno se encuentra un antiguo pajar con dos módulos independientes que se pueden restaurar como apartamento de invitados, también tiene un lagar de tea de gran patrimonio histórico. La finca dispone de acciones de agua y está plantada con papas, frutales, maíz, viñedos y plantas ornamentales. Distribuida con caminos en diferentes terrazas. Una parte del terreno tiene un pequeño bosque de pinar canario, dispone de una zona de aparcamiento y su perímetro está totalmente murado y vallado.