Esta preciosa villa de estilo ibicenco, reformada en el año 2006, se encuentra ubicada en Altea. Diseñada en una gran parcela con forma de riñón y con espectaculares vistas al mar y la montaña, esta vivienda ofrece un entorno privilegiado para disfrutar del paisaje mediterráneo. Con una parcela de 1983 m2, la propiedad cuenta con amplios espacios exteriores ideales para relajarse o compartir momentos inolvidables junto a familiares y amigos. El interior de la casa incluye un acogedor salón con chimenea donde pasar las tardes más frescas del invierno. Esta encantadora villa es sin duda ideal tanto como residencia permanente como segunda vivienda.