No se trata sólo de una casa, sino de un concepto de vida. El diseño nace de la idea de un emprendedor y soñador valenciano que quiso plasmar su rico mundo interior en una casa-habitación para él y su familia.
Con ideas muy avanzadas para su época, este hombre de convicciones, apasionado por la naturaleza y el cosmos, decide construir a mediados de los años 60 una casa en plena Sierra Calderona, orientada al sol y en una cierta alineación con los astros. Con la forma de una semicircunferencia, el interior parece proyectarse infinitamente en el paisaje como una vista panorámica eterna, gracias a los enormes ventanales que separan el interior del exterior, como si el paisaje fuese la cuarta pared de las habitaciones concéntricas. La estructura combina el hormigón, el hierro y el ladrillo. Los elementos de hierro forjado de las grandes ventanas circulares de la planta semi-sótano son extraordinarios desde el punto de vista ornamental.
La edificación, concebida por semicircunferencias concéntricas, se eleva en cuatro niveles. El más bajo es el del semisótano, que da cabida a dos garajes con acceso independiente, un cuarto de servicio y un gran espacio diáfano. Desde esta planta se accede interiormente a la planta principal.
La planta principal, a la que se accede desde el exterior mediante dos escalinatas simétricas, una a cada lado de la pared norte, está precedida por una terraza circular. Esta planta es la que alberga el salón principal, el comedor y la cocina, así como un cuarto de baño y una habitación. Las paredes están ordenadas radialmente. Una terraza de casi tres metros de ancho circunda todas las habitaciones. Es en esta planta que nace la increible escalera de forma helicoidal que se extiende hacia arriba como si fuera el ala de un pájaro pronto a emprender el vuelo. La escalera se aloja en un espacio delimitado por dos arcos de circunferencias contrapuestas, generando una forma abstracta de ojo.
La planta primera es identica a la predecesora, sólo se diferencia en la existencia de más divisiones del espacio, mediante paredes radiales, es decir que nacen del centro de la circunferencia, dando origen a cuatro habitaciones, dos cuartos de baños y un gran salón central con chimenea, todo los espacios rigurosamente simétricos. En esta planta se repite la terraza circundante.
En la última planta encontramos un espacio sin igual, una suerte de sala-observatorio, como si se tratase de una torre de control de aeropuerto, desde esta sala se accede a la terraza superior que permite abarcar con la mirada (y el alma) tanto el paisaje terrestre como el cielo.
Como se puede observar, esta edificación está repleta de simbolismos. Es difícil de explicar con palabras la sensación de bienestar y de armonía que se percibe estando en ella, aún cuando las vicisitudes por las que ha pasado esta propiedad en los últimos decenios, debido en parte a la prematura partida de su extraordinario autor y que ha impedido ver del todo completada la vivienda y sus exteriores, pasando de ser una vivienda hasta convertirse, al ser alquilada, en un sitio emblemático de la movida valenciana de los años 80, hasta que fue cerrado al público y devastada en parte por gente inescrupulosa hace unos años atrás.
Hoy, resurgiendo de las cenizas como el Ave Fénix volverá a esplender en medio de la crisis mundial, del desequilibrio medioambiental y de la irritación creciente de la sociedad, pudiendo convertirse en un refugio en armonía con la naturaleza y en un ejemplo de edificio bioclimático, ya que debido a su orientación al sur y a sus características de diseño, se pueden conseguir en su interior temperaturas adecuadas tanto en invierno como en verano, pudiendo ser transformada además en una edificación autosuficiente en energía y perfectamente integrada en el paisaje.
Con una versatilidad extraordinaria, el diseño del edificio permite adaptar el concepto original de casa al de hotel, al de restaurant, incluso al de sede empresarial o al de centro terapéutico.
Gracias a sus más de 4.600 m² de terreno y a la rara oportunidad de adquirir además de la propiedad, casi dos hectáreas y media de parcelas con pinares situadas frente a la casa, se abren muchas opciones para quien desee mantener con vida la genial visión de su creador.
1. **Diseño Inspirado y Simbólico**: El diseño de la casa, basado en una semicircunferencia y orientado hacia la naturaleza y los astros, demuestra una profunda conexión con la espiritualidad y la naturaleza. Los elementos simbólicos, como la escalera helicoidal y la sala-observatorio, añaden un nivel adicional de significado y belleza al lugar.
2. **Historia única**: La historia de la propiedad, desde su concepción como un proyecto personal hasta su transformación en un bar de copas emblemático de los años 80, agrega un elemento interesante a su pasado.
3. **Potencial de Sostenibilidad**: La orientación al sur y el diseño bioclimático de la casa ofrecen oportunidades para crear un hogar energéticamente eficiente que pueda mantener temperaturas adecuadas durante todo el año. Esto es especialmente atractivo en un momento en que la sostenibilidad y la eficiencia energética son importantes.
4. **Versatilidad de Uso**: La versatilidad de la propiedad para ser transformada en un hotel, restaurante, sede empresarial o centro terapéutico amplía las oportunidades para futuros propietarios o inversores. Esto la convierte en una inversión versátil.
5. **Amplio Terreno Adicional**: La posibilidad de adquirir más de dos hectáreas y media de parcelas con pinares frente a la casa brinda un espacio adicional que podría utilizarse de diversas maneras, como expansión, desarrollo o conservación de la naturaleza circundante.