Presentamos esta singular propiedad, una auténtica joya de 1945, situada en una posición de esquina y adosada a otra vivienda, en un entorno lleno de encanto y tradición. Construida principalmente en piedra, esta vivienda ha sido cuidadosamente saneada y semi-restaurada, lo que permite conservar sus sólidos muros originales, llenos de historia y carácter. Este es un aspecto que no solo preserva la estética encantadora de la propiedad, sino que también ofrece una base robusta para completar la reforma, manteniendo la esencia de las construcciones de antaño. Con una parcela de 312 m², la propiedad se distribuye en dos construcciones de 50 m² y 85 m² respectivamente. Entre ambas se extiende una amplia terraza descubierta de 75 m², perfecta para disfrutar del clima mediterráneo, así como una terraza cubierta de 60 m² que ofrece la posibilidad de ser integrada en la vivienda, ampliando aún más su espacio habitable y potencial. Esta propiedad, aún por terminar, se presenta como una oportunidad ideal tanto para inversores como para aquellos que valoran la nostalgia y el carácter de las construcciones tradicionales. Su estado actual permite a los nuevos propietarios plasmar su visión, completando la reforma para adaptarla a sus necesidades y gustos personales. Ubicada en una zona privilegiada, la vivienda se encuentra a tan solo 3 km de la exclusiva Urbanización La Marina y a 8 km de las hermosas playas de La Marina y Guardamar del Segura, brindando la oportunidad de disfrutar de la tranquilidad del entorno rural sin renunciar a la proximidad del mar y los servicios. No deje pasar esta oportunidad única de adquirir una propiedad con tanto carácter y posibilidades en un entorno tan deseable. ¡Contáctenos para más información o para concertar una visita!