Esta encantadora villa en una tranquila urbanización cercana a Castell d’Aro se encuentra en una parcela de 1.600 m² con 288 m² construidos. De estilo rústico y con acabados de calidad, la casa está rodeada de un amplio jardín con excelente orientación. Al entrar, un camino privado lleva al garaje para tres coches y al recibidor exterior, con una terraza que ofrece vistas espectaculares al mar y la bahía de Platja d’Aro. En su interior, la cocina independiente de madera maciza se conecta con un porche de 35 m² y con el salón-comedor, que cuenta con chimenea y acceso a una terraza privada de 25 m². La zona de noche dispone de dos dormitorios dobles con armarios empotrados y un baño completo, además de una suite principal con baño privado. En la planta baja, el garaje conduce a dos salas de 50 m² con salida al jardín, ideales para crear un espacio adicional o un apartamento privado. Con una ubicación privilegiada, privacidad y vistas excepcionales, esta villa es perfecta tanto como residencia principal como segunda vivienda en la Costa Brava.