Chalet en zona tranquila a un kilómetro de la playa de la Fustera. La vivienda está constituida por una planta sótano con garaje y trastero, y una planta baja con salón con chimenea, cocina/comedor espaciosa, 3 dormitorios (uno muy pequeño) y dos baños. Tiene también terraza cubierta acristalada, terraza techada y terraza descubierta. Vivienda reformada con calefacción central a gas.